Esteban Ibarra

Estamos hoy concentrados para mostrar nuestro más absoluto rechazo a unos hechos muy graves de violencia, a unas conductas de intolerancia criminal que han podido concluir en una tragedia irreparable poniendo en riesgo la vida misma de unos jóvenes vecinos de Sanse. Sean nuestras primeras palabras para el deseo de su pronta recuperación médica y de solidaridad hacia ellos y sus familias de las que nos consta su sufrimiento ante unos hechos de esta envergadura.
Queremos también en estas primeras palabras reclamar la detención de los responsables de esta conducta criminal y su puesta a disposición judicial dejando claro, desde el primer momento, que no hay ni habrá la más mínima posibilidad de impunidad ante estos hechos tan graves de intolerancia criminal. Es el Estado de Derecho el que debe de actuar y en ningún caso responder con la Ley del Talión, responder a la violencia con violencia. Según las primeras declaraciones de los jóvenes apuñalados, los presuntos autores son miembros de un grupúsculo neonazi, alguno de ellos sobradamente conocido y con antecedentes, los que ese viernes salieron de “cacería” a agredir a personas diferentes objeto de su odio ideológico y violencia desde su motivación racista. Deben de ser detenidos y puestos a disposición judicial.
No es la primera vez que suceden hechos graves de esta naturaleza. Damos testimonio de que esto está sucediendo también en otras ciudades españolas y también se extiende en toda Europa. Vivimos un tsunami de intolerancia criminal hacia el diferente por razón de origen territorial o nacional, por su orientación sexual e identidad de género, por ideología, como han sufrido estos jóvenes apuñalados al grito de “rojo de mierda –guarros”, por identidad religiosa o convicciones, por su aspecto o por ser personas sin hogar o por cualquier característica que para estos grupos señale a una persona como objeto de sus crímenes de odio
Hace poco tiempo nos reunimos en el Observatorio de la Violencia, la Xenofobia y la Intolerancia de San Sebastián de los Reyes constatando la preocupación por este tipo de hechos. Hace dos semanas, el Gobierno presentó el III Informe sobre Delitos de Odio en España que alcanza el dato de 1.324 agresiones denunciadas. Nos consta que hay varios miles más no denunciadas y no esclarecidas. Y esto no puede ser así. Debemos de recordar que desde el asesinato de Lucrecia Pérez a manos de jóvenes neonazis, se han producido más de 90 homicidios, crímenes de odio, en nuestro país y miles de agresiones al respecto y por ello, para la persecución de estos delitos se ha reforzado el Código Penal y se han creado más de medio centenar de Fiscalías contra los Delitos de Odio.
Es preciso no solo que se detenga a los culpables de los hechos criminales, es necesario que se desarticulen los grupos y se ponga a disposición judicial a quienes participan de organizaciones neonazis porque estas son ilícitas y están sancionadas en el tipo recogido por el 515 de nuestro Código Penal. Son grupos y organizaciones cuya permisividad en democracia resulta imposible porque están prohibidas penalmente.
Pedimos a la policía, a la fiscalía y al Juzgado que actúen a fondo, que detengan a los culpables y que desarticulen los grupos neonazis poniendo a sus miembros frente a su responsabilidad delictiva. Nadie se puede organizar para el ejercicio de la intolerancia criminal, nadie se puede asociar par promover el racismo o la homofobia, nadie se puede agrupar para ejercer la violencia y nadie, ni si quiera individualmente, puede cometer estas conductas esperando disfrutar de impunidad porque las instituciones y la ciudadanía democrática no lo va a consentir.
Digamos Basta Ya, caminemos todos unidos, Ayuntamiento, instituciones y ciudadanía, todos unidos contra la violencia, el racismo y la intolerancia, siempre con las víctimas y confirmemos una vez más, nuestro compromiso por un San Sebastián de los Reyes de la concordia, tolerancia y convivencia donde el respeto a la dignidad de la persona y a sus derechos humanos es el signo distintivo de nuestra ciudad.

San Sebastián de los Reyes, 6 de marzo de 2016