Recientemente vinieron dos amigos personales a visitarnos a Madrid, donde pudimos hablar de diversos temas que oscilaban desde papel que tiene que asumir la ciencia en la era de la nanotecnología ,hasta de cuestiones políticas que se tornaban antagónicas en nuestros puntos de vista, a la hora de entender la relaciones que se establecen entre el poder y los ciudadanos,ellos con una vertiente de izquierdas y votantes de Podemos,y nosotros libertarios hasta la médula cerca de los austrolibertarios.
Pero Ángel lo define magistralmente en su texto,la ideología,el género o la etnia no nos define cómo personas.
Les pedí a cada uno de nuestros amigos, Ángel y Clara, que una vez que conocieran a Esteban Ibarra ,y si era posible, que plasmarán por medio de una reflexión escrita el encuentro que tuvimos con Esteban , y sus impresiones de lo trasladado por el, cuya función independientemente de ser el presidente del Movimiento Contra la Intolerancia, es la de un activista incansable que deja hasta su último aliento desfalleciendo por la convivencia ciudadana,el respeto a la condición humana y el conocimiento para superar prejuicios de otras formas de pensar.
Ángel ha sido el primero de ellos en establecer su texto.
Muchas gracias por tu aportación.
Omar Jerez
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Texto de Ángel.
Hola Omar y Julia.
Os dejo mi escrito para lo de Esteban Ibarra.
Estando en Madrid con Clara y mis buenos amigos Julia y Omar, tuvimos la oportunidad de conocer personalmente a Esteban Ibarra.
Fue una experiencia agradable, instructiva y didáctica sobre el movimiento contra la intolerancia.
Tras entrar en un local y cruzarnos con la hija de Lucrecia Pérez, al parecer también implicada con la causa, nos encontramos con Esteban Ibarra, y tras presentarse de manera muy cercana nos llevó a una mesa donde pudimos charlar y escuchar tranquilamente su manera de ver la situación social. A mi juicio una manera llana, no clasista, realista y humanista.
Comenzó la conversación dándonos su punto de vista en cuanto al sionismo y el conflicto árabe-israelí. Fue dando saltos explicativos que llevaron la conversación al holocausto nazi y la posterior resolución de los derechos humanos.
La conversación se debatió entre distintos temas, problemas sociales que denuncia el movimiento contra la intolerancia como el terrorismo, los conflictos de inmigración o el sensacionalismo político.
En general la conversación fue como una charla distendida entre amigos con un mismo punto de vista.
Concluimos la reunión de manera amigable y echando unas risas. Realmente estuvimos cómodos e implicados con la tertulia, hasta tal punto en el que la despedida se postergó sucesivamente por las distintas experiencias y opiniones que íbamos exponiendo.
Escuchar a Esteban reafirma mi punto de vista; vivimos en una sociedad que no educa, que no conciencia y que separa a las personas por su clase, género, trabajo, ideal político, aficiones, raza, procedencia… Y un sinfín de trivialidades que no nos definen como personas.
Es un nado a contracorriente el que gente como Esteban están dispuestos a afrontar diariamente.
Lo que realmente valoro personalmente de Esteban Ibarra y la organización del movimiento contra la intolerancia es su lucha constante por la igualdad, su activismo constante y sus charlas educativas, basadas en algo tan fundamental como los derechos humanos.
Considero que hacen un trabajo muy duro. Concienciar a la gente despolitizando los conceptos de convivencia y apartando los extremos idealistas. Para mí eso es digno de admiración, estos si son auténticos superhéroes.
El estudio y la información nos hacen ser conscientes de que las personas son personas. El diálogo sosegado, la empatía y el aprendizaje nos lleva a este estado de comprensión. De esta manera podemos comprender a la gente, compartamos o no compartamos las distintas opiniones, pero siempre con respeto.
En conclusión y como opinión personal pienso que los políticos y mandatarios deberían mantener ese concepto para que la sociedad humana fuera mucho mejor.
Tan sólo queda esperar que empiecen a darle mucha más importancia a algo que facilitaría la apertura de ojos del colectivo social: La Educación.